jueves, 4 de noviembre de 2010

Las mujeres de verdad tienen curvas



¡Hola cinéfilos! En esta entrada os voy a hablar de una película buenísima que estoy segura de que os va a gustar (sobre todo a las mujeres). El título lo dice todo "Las mujeres de verdad tienen curvas", y punto. Lo sentimos mucho Valentino, Armani, Dior y compañía, pero por más que os empeñéis, ¡no nos vais a cambiar!

T. original: "Real women have curves"
Dirección: Patricia Cardoso   
Intérpretes: América Ferrera, Lupe Ontiveros, Ingrid Oliu, Brian Sites.
Guión: Josefina Lopez      George LaVoo  
Fotografía: Jim Denault  
Música: Heitor Pereira

Ana, una adolescente méxico-americana, está a punto de convertirse en mujer. Vive en la comunidad hispana del Este de Los Ángeles, y recién acabado el instituto su profesor la anima para que solicite una beca para estudiar en la Universidad de Columbia. Pero sus tradicionales padres piensan que no es tiempo para estudiar, sino para ayudar a su familia. Dividida entre sus ambiciones personales y su tradición cultural, accede a trabajar con su madre en la fábrica de costura de su hermana, en el centro de Los Ángeles.


Desde el comienzo de la película sentí una enorme empatía por Ana y me puse en su lugar. Una chica inteligente y con ganas de estudiar que se ve forzada a trabajar en una fábrica de costura para ayudar a su familia, con una madre que no la comprende y siempre la constante insistencia de su madre en que adelgace para estar guapa y encontrar un marido.

Nada más lejos de lo que Ana sueña para su futuro, ella se siente atrapada en un lugar del que quiere salir, con ambiciones y ganas de ser alguien en la vida. Esta película, a parte de ser muy divertida, es una reivindicación de las mujeres reales. Todas las mujeres que conozco, por más preciosas que sean, tienen algún complejo porque, parece ser, que hoy en día hay que ser lo que las revistas llaman "perfecta" para sentirte bien contigo misma.

"Ana, no te comas el flan!" esta frase que le dice Carmen a su hija en la película se me quedó grabada, y cada vez que me como un postre me acuerdo, y me lo como con más ganas.
Es un film con mucho humor, que retrata muy bien el mundo en el que vive Ana, las ganas que tiene de ir en contra de lo que la gente cree correcto, y al mismo tiempo su temor a hacerlo.




Se trata de una película deliciosa que os dejará a todos un buen sabor de boca... ¡que aproveche!